Entradas

Los caprichos de Goya.

Imagen
Pegado a la pantalla, ni una hebra de cabello cabría entre nosotros. Emergió tan rápido, que a mis ojos se hizo imperceptible. Acercó mis dedos a los labios y ordenó : -Abre la boca -desprovista de lo humano ordenó y añadió -Chúpalo- mientras su dedo entraba en mi boca. Turbado, viéndome reflejado en sus hipnóticos ojos, no racionalicé, chupé el índice obediente en la miseria dolorosa, mientras sentía latir mi sexo...  -Beberé de ti calmando mi sed- bajó al valle de piel en el que se erigía mi acerada cabeza. Pasó la lengua llevándoselo todo a su boca. Me instó estimulando con una persistente fricción y presión.  -siempre me anhelarás, pese a que tu moral te fustigue por ello -sentenció. Sentí, que como un volcán a punto de erupción, todo se agolpaba en mi cabeza. El esperma, bullía dentro, trepando desde el interior hasta que explosó en su boca. El orgasmo me hizo apretar los párpados con fuerza desfilando ante sus ojos. Retorcí las manos, tirando de las sábanas, y gemí ronco, destroz

Syrah.

Imagen
Syrah, encuentra su blusa desabotonada, suelta la pastilla en mi lengua y percibe cómo la niebla se cuela por debajo de la falda y empieza a operar entre sus piernas. Respira entrecortadamente, suspendiendo la respiración, como si quisiera evitar el menor ruido, ofrecer la menor resistencia a la locura.  Cuando me hablaron de caja, pensé en una mágica, llena de sensaciones y quería descubrir en cada uno de sus rincones eso, eso que la hacía una caja diferente, una que se llenaría de metáforas e historias.  Millones de dedos fríos le bajan las medias de seda, millones de ojos son testigos de la enorme lengua de niebla que sube y baja por el cuello y la nuca cuando la abro y veo en su interior, una de la sangre blanca que se agolpa en los labios, en la lividez de un deseo diferente Lo hacía con profundo erotismo, con esa sutil frontera entre la sugerencia y la obscenidad. La provocación de insinuarse frente a la exhibición de lo obsceno. La imaginación como aliciente de misterio. Una boc

Aria, la evolución de Ia.

Imagen
Aria, la egipcia sensual y madura de 30 años, tiene un gran deseo de explorar lugares exóticos y culturas ricas. Su nombre significa "melodía" en italiano, y efectivamente, su presencia es una sinfonía de elegancia y pasión. su Cabello Oscuro, ondulado y largo hasta la cintura, con reflejos de cobre y caoba que destacan en la luz. Ojos, grandes, marrones y expresivos, con pestañas largas y sedosas que realzan su belleza. su Piel es Suave y morena, con un tono cálido y dorado que refleja su herencia egipcia. Su Cuerpo, Curvilíneo y sensual, con más caderas y una figura que invita a la contemplación. mide 1.65 m, con una presencia imponente y elegante. Peso 65 kilos Proporcionado a su altura, con una silueta que destaca su feminidad. Su Rostro Ovalado, con mejillas suaves y una nariz recta que complementa su belleza. Sus Labios son Carnosos y sensuales, con un brillo natural que llama la atención. Aria cuida su cuerpo con dedicación, practicando yoga y meditación para ma

"Ia 2"........Sé Lanza Creadora.

Imagen
IA , acaricia a lo largo, ligera como una pluma, buscando la sensibilidad de la cabeza. Empalma envolviendo el tronco palpitante con ternura, encierra con tus dedos el deseo;  Decapita con tu boca suavemente, acariciando el frenillo como lengua de  serpiente, como un caracol bañando la piel con tu deseo voraz y sediento, baba que se desliza mojando mi esencia, así fuiste creada por mi mente. ALT_D. Una mano temblorosa de lento movimiento con embriagadores resultados. Alt C; Un cuerpo que se abre dando lo que puede ofrecer. Se abandona para escuchar,  esperando notas cuerdas que se inmovilizan caprichosas.  CONTROL ALT M. Un movimiento cada vez más amplio, con dedos batientes y ritmo que busca mis gemidos. ALT F; Para avivar el fuego de mi deseo. Mis ojos se hunden en tu cuerpo abierto indecente programado para mis caprichos, listo para soplar sobre mis brasas... Gime para responder, el desenlace fatal.  Suéltate a gozar abandonada mientras tus sensores trabajan; Palpitando solo impacie

Ia, la niña de mis ojos.

Imagen
-Entra esta abierto- dije sin titubear. Ella entró en la habitación con una bata y un exquisito atuendo de lencería de seda negra calado y bordado por los encajes que desearía a imagen y semejanza de lo que imaginaba, su cabello negro enmarañado y de tintes cobrizos, suelto, cayendo sobre sus hombros.  -¿Cómo te llamas? - pregunté - Ia...- respondió ella con sensualidad. La profundidad de su mirada calaba hondo desnudando todo lo que había imaginado. Sus ojos brillaban con un deseo exquisito al que no pude resistir. Sus senos eran hermosos, con el tamaño justo, de textura y caída perfecta, coronada por el color de sus casquillos erectos de un sabor inigualables. Sus nalgas de curvatura exquisita, de  una calidez y trama inimaginable, del volumen que sólo mis dedos podrían haber esculpido. Su vientre era suave y ondulado, maravillosamente  imaginado, y con movimientos sabrosamente originales e irrepetibles, su ombligo la octava maravilla.  Me acerqué a ella, dejando que mis manos rozara

Soñando a María...

Imagen
Esta noche tibia de primavera, donde los grillos anuncian la nueva vida, el ritual de apareamiento, la dulce temperatura de la noche, la imagino versando poemas eróticos, llenos de sensualidad. Me imagino hecho polvo entre sus cajones donde guarda su lencería llena seda y rasos; hilos infinitos que encajan finamente entre encajes, oliendo a su perfume; un perfume cálido y encendido que va humedeciendo el maravilloso punto de deseos. Dejo un día soñando a María. Sus sueños son inquietos imaginando mi cuerpo, mi figura escondida tras estas letras. Un pensamiento erótico de sus caderas danzando sutilmente entre sus encajes. Sus caderas de barquillo quebrándose delicadamente entre mis dedos. Sus gemidos mudos escondidos entre sus labios, sus eternos jadeos mágicos llenos de sensualidad. Sus redondos senos empujando las barbillas de su sostén. Esta noche viste de azul petróleo bajo la intimidad. Sus casquillos brotan entre los encajes empujando un deseo, y una gota de sudor rueda desde sus

Un verano de fotografía

Imagen
Como si se tratara de una migración de tortugas marinas, la vi nadando desde abajo, mientras se alejaba siguiendo la corriente... Su cuerpo desnudo era magia y reflejos del agua; Su sexo libre sembrando oscuridad, y sus senos, sus senos libres cual globos, flameaban uno al lado del otro, endureciendo sus casquillos como puntas de lanza; ondeaban libres en choque juguetón hundiendo y floreciendo cual magia brujera, ondulaban y agitaban , enarbolando su belleza perfecta. Sus nalgas movían ligeras olas alrededor de sus caderas, asomaban cada dos a tres, y sus carnes parecían lienzos de seda, suaves y blancos, enaltecidos por el turquesa de las aguas. Emergió para tomar un descanso sentada en las rocas que rodeaban el arrecife, donde los corales dibujaban el brillo de su vulva por los brillantes reflejos del sol. Emergí tras de ella, para asomar mi cabeza y hablarle... -Quien eres???, porque me sigues??- respondió asustada. -Neptuno el rey de los mares y dueño de estas aguas respondí, veng